26 jun 2008

Corazón suicida...




Dolor jovial de perder
las cosas idolatradas.
Dolor que cuesta la vida
a veces,
y a veces no cuesta nada.
Le dije una vez: te quiero,
como nunca le había dicho
ni le volveré a decir.
Le dije desesperado
porque sabía que muy pronto
otro se lo iba a decir.
Le dije desesperado,
mas no me he de arrepentir.
La quise tanto, la quise
porque llevaba en los ojos
una brizna de infinito;
por sus cabellos castaños,
por su boca
bárbaramente desnuda
la quise, la quise tanto...
Mas la quería la gente
a la vez,
que me dije: no es plausible
el ofrecer
- si la quiere tanta gente-
cosas que no ha menester.
Pensé matarme myself
entonces,
mas no lo hice, porque
me pregunté ¿Y para qué?
Abismado en el dolor
me dejé crecer las barbas
porque ese límpido amor
gustaba reírse de ellas,
que las barbas fueron siempre
- dicen - solaz de doncellas

Dolor jovial de perder ...


Poema inspirado por Renato Leduc, telegrafista mexicano para La Sayonara, extraído del libro "La novia oscura" de Laura Restrepo.

2 Comments:

Anónimo said...

Me gustó la frase de que llevaba en los ojos una brizna de infinito

Todo el poema pero esa frase más...

Afrodita said...

Como siempre gracias por la visita y todos los comentarios Atenea. Espero seguir a la altura de tu enseñanza...